Un proyecto integral para chuparse los dedos.
Como ocurre a menudo, con las mejores ideas, el nombre de La Ostia Divina nació en una comida familiar, en una sobremesa.
Un encargo llegó hasta nosotros. Un cliente Andrés y Laura, su hija, nos contaron su proyecto. En Fosforito, tuvimos la suerte de contar con esta valiente y maravillosa familia para darle vida a este reto. Y nos pusimos manos a la obra. Confiaron en nosotros el lanzamiento de la marca y un e-commerce de venta de productos artesanos de la Región de Murcia. ¡Para chuparse los dedos de placer!
Un lettering de la Ostia para la ocasión
La marca
El nombre entrañaba sus riesgos: La Ostia Divina. Por sus connotaciones religiosas, detectamos que podía ser un freno y que podía causar rechazo. Un riesgo que estaba ahí. Al mismo tiempo, ese riesgo era lo que le hacía destacar tan positivamente.
Por eso, decididos cambiar totalmente el registro y alejarlo de lo que pudiera esperarse. Queríamos que cuando la marca estuviera diseñada se perdiera totalmente la referencia con este aspecto religioso y que su personalidad fuera tan súmamente marcada que al verla, olvidaras cualquier otra asociación. A día de hoy, podemos decir abiertamente: objetivo conseguido.
Dinamización de perfil Instagram
El tono y el estilo gráfico
Desde el primer momento, entendimos lo que Laura quería transmitirnos. La idea era posicionar los productos para un target notablemente más joven en un canal diferente, la redes sociales.
El reto no era pequeño. Para empatizar con nuestro público de Instagram y conectar con él, adoptamos un lenguaje propio de las redes sociales. Creamos unos códigos visuales para Instagram al que nuestro público se mostrase receptivo con estilo singular, un lenguaje audiovisual muy fresco, limpio alegre y colorista… Apostamos por los stories de Instagram con minivideos muy creativos. ¡La comunidad no para de crecer!
Dinamización de perfil Instagram
El tono y el estilo gráfico
Desde el primer momento, entendimos lo que Laura quería transmitirnos. La idea era posicionar los productos para un target notablemente más joven en un canal diferente, la redes sociales.
El reto no era pequeño. Para empatizar con nuestro público de Instagram y conectar con él, adoptamos un lenguaje propio de las redes sociales. Creamos unos códigos visuales para Instagram al que nuestro público se mostrase receptivo con estilo singular, un lenguaje audiovisual muy fresco, limpio alegre y colorista… Apostamos por los stories de Instagram con minivideos muy creativos. ¡La comunidad no para de crecer!
Una puesta en escena impecable
Diseño de packaging
La experiencia de compra es algo que continúa incluso después de haber recibido el producto y haberlo degustado. Por eso, pensamos que teníamos que realizar un diseño packaging acorde para la marca. El diseño de la caja, el diseño de las etiquetas… Incluso se nos ocurrió que para incentivar la compra y para diversas acciones con influencers que se estaban realizando, enviaríamos unos delantales con la marca serigrafiada.
La respuesta fue muy positiva, ya que la gente nos enviaban sus videos cocinando nuestros productos, haciendo de ella un escaparate ante sus miles de fans.
Una tienda online con mucha chicha
Diseño de web e Ecommerce
Y como no podía ser menos, la herramienta diseñada para vender que justifica todo el proyecto; la dinamización del perfil de Instagram y Facebook y el diseño del packaging: la tienda online. Para crearla, debían cumplirse varios requisitos. Primero, debía ser coherente con la comunicación, por eso el estilo colorista y la manera tan diferente de presentar productos tradicionales la hacen tan diferente.
Queríamos que la experiencia de compra fuera única, desde que se llega el primer impacto, hasta que se recibe el paquete en casa. Por eso, cuidamos todos los detalles. Un proyecto de la Ostia, de principio a fin.